martes, 3 de noviembre de 2015

La Metamorfosis, de Franz Kafka


 "Una mañana, al despertar de un sueño intranquilo, Gregorio Samsa se encontró en la cama transformado en un insecto monstruoso. Estaba acostado sobre la espalda, que era dura, como acorazada, y levantando un poco la cabeza pudo ver su vientre convexo, color pardo, dividido por unos arcos rígidos; la manta había resbalado sobre esa superficie y solo una punta lo cubría todavía"

Así comienza uno de los libros más célebres de la literatura universal: “La Metamorfosis”, de Franz Kafka. Aunque Franz Kafka escribió esta obra en 1912, el texto no se publicó hasta tres años más tarde, en 1915. Por esa razón, este año, el 2015, celebramos el centenario de la publicación de la novela.

Sobre el escritor, debemos señalar que Kafka fue un personaje particular. Sólo publicó algunas historias cortas durante toda su vida -una mínima parte de su trabajo-, por lo que su obra pasó prácticamente inadvertida hasta después de su muerte. Fue autor de tres novelas -El procesoEl castillo  y El desaparecido- una novela corta -La metamorfosis- y un gran número de relatos cortos, además de un enorme epistolario, que algunos señalan que tiene incluso más valor que el resto de su obra. Sin embargo, a pesar de su fama actual, muchos de sus coetáneos decían que Kafka no sabía escribir, que sus historias no tenían ningún tipo de sentido, que eran absurdas. De hecho, el término Kafkiano se utiliza para describir situaciones absurdas y complejas.

Hoy en día, Kafka goza de mayor fama y valoración que en su época, aunque siguen existiendo diversos críticos que no valoran demasiado su obra. En muchas ocasiones, la fama y la valoración vienen tras la muerte. ¿Cuántos grandes escritores no se han perdido y se perderán por unas circunstancias adversas; malas publicaciones, peores editoriales, márquetin, etc.? ¿Y cuántos autores no son ensalzados en vida y no pasan luego el examen de la historia?

Sea como fuere, lo mejor que puede hacer para tener una opinión propia –si no tiene alguno de sus libros- es acercarse a una librería y comprarse un ejemplar de cualquiera de sus textos. Le cautivará o le causará repulsión. Pero así era su escritura. Que lo disfruten.